La henna para el pelo se utiliza como tinte natural que aporta color al cabello pero que también lo nutre, le da fuerza y hace que esté más protegido. Además, ayuda a eliminar la caspa y a combatir la caída.
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La henna para teñir el cabello nos ayuda a protegerlo de las inclemencias meteorológicas como el viento o el sol; hace que se vuelva más fuerte porque le aporta nutrientes de manera natural; asimismo, contribuye a controlar la grasa del cuero cabelludo por lo que es muy apropiado para personas con el pelo graso; también combate la caspa, aporta volumen, se puede usar con la frecuencia que se quiera, porque es natural, cosa que no ocurre con los tintes artificiales, repara las puntas abierta y contribuye a frenar la caída del cabello. Así que, como ves, no sólo es un tinte para dar color o cubrir canas, si no que la henna es mucho más.
Características de la henna para el pelo
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La henna para el pelo, como vemos, tiene muchos beneficios para cuidar el cabello y darle un aporte de vitaminas y minerales. Hay que tener en cuenta, no obstante, que no encontraremos la misma gama de colores que con los tintes habituales, ya que la henna sólo permite colores anaranjados, marrones, caobas y rojizos. Además, no puede teñir de colores oscuros a claros porque no tiene acción decolorante. Su efecto dura entre dos a cuatro meses, se va perdiendo con los lavados. Los reflejos cobrizos que crean resaltan con la luz del sol y quedan muy bonitos.
Para aplicarte la henna para el pelo has de hacer una mezcla: hierve un poco de agua, añade polvo de henna en un recipiente de plástico (si usas de mental puede afectar al color resultante) y ve echando el agua. Remueve hasta que quede cremoso, sin ser demasiado líquido ni demasiado consistente. Aplica la masa en el pelo seco cuando se haya enfriado y tapa con una toalla. Usa guantes porque tiñe un montón las manos. Debes dejarlo actuar por lo menos durante tres horas, cuanto más tiempo lo dejes, más oscuro quedará el color. Sigue siempre las recomendaciones del fabricante. Si tu pelo es más claro, tenderá a teñir hacia el naranja, si es más oscuro, hacia los rojos. Aclara la henna y lava el pelo con tu champú habitual. No te pongas otro tinte hasta que te cortes el pelo, porque pueden quedar restos aunque en apariencia ya no haya color, y si te lo tiñes encima el tono final no será el que pretendías obtener.
